Batán Página 20

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Finalidad del tratamiento

El batano es un proceso de acabado de la lana muy importante ya que influye en el tacto y el aspecto
y la compacidad del tejido, aprovechando el fenómeno del afieltrado, característico de la lana, que
reduce las dimensiones del tejido, tanto en largo como en ancho, aumentando su densidad, tenacidad,
espesor, peso unitario e impenetrabilidad a los agentes atmosféricos, con afieltrado superficial o
profundidades variables en relación con: duración del tratamiento, calidad y estructura del tejido y fibras.
El batanado se realiza principalmente sobre tejidos de lana cardada para obtener paños y franelas, un
fibra fina, a una temperatura de 40-45 °C, con una humedad alrededor de 40% y en un ambiente generalmente
básico, más raramente ácido o neutro.

tecnología de procesamiento

En el cacharro clásico, de dimensiones contenidas, se trabajan piezas únicas. Está formado por:
1. un par de cilindros (ver figura A, punto 1) que hacen avanzar la tela con fuerte presión
ajustable. A la entrada de la tela hay guías y dispositivos de parada en caso de
enredos (fig. A, 2);
2. un par de cilindros verticales ajustables para el encogimiento de la tela de trama y un par
de mordazas (fig. A, 3), que regulan la distancia y por tanto el retorno de la trama;
3. una caja o canal de fresado (fig. A, 4), colocado a la salida de los cilindros.
Su parte superior, llamada “ciabatta” (fig. A, 5), puede ejercer una presión regulable sobre el tejido
que, al llegar a él, es "engullido" y sufre un retorno en la dirección de la urdimbre.

Otros elementos presentes en el fuller son:
1. un dispositivo de parada automática (fig. A, 2), que consiste en una barra de metal que descansa sobre el
tela de la que nota nudos o hinchazones, en este caso chocando contra el botón de stop;
2. los rociadores (fig. A, 6), dispositivos cerca de la entrada que rocían una mezcla de fieltro sobre el tejido;
3. panel de control, ubicado en el frente de la máquina, regula el proceso de trabajo.
Con máquinas automáticas equipadas con detectores de porcentaje de retorno y parada en el resultado
programado, el sensor para detectar el retorno debe coserse al final del bucle de piezas.

Ejecución de procesamiento

Solemos procesar piezas en saco que, una vez introducidas en la máquina, también se unen
cosido en un anillo, para ser trabajado en un ciclo continuo.
Si el tipo de tejido lo permite, para obtener un encogimiento más fácil en el sentido del ancho
de la pieza y excelente resultado manual, la cabeza de la pieza se pasa 2 o 3 veces por el grupo
fulling antes de la costura del anillo.
También es necesario colocar, en la cabecera de la pieza, dos campanas de alambre separadas un metro entre sí.
por otro en el sentido del largo de la pieza para comprobar el retorno de la urdimbre obtenida. Si, anuncio
ejemplo, el llenado en curso requiere un reembolso de 20%, el proceso se completará cuando el
Las campanas estarán a una distancia de 80 cm.

La sangría de la trama (ancho) se mide directamente sobre el ancho de la pieza.
El batanero debe prestar mucha atención y dejar de trabajar para comprobar:
Al principio, la adecuada humectación y el normal hinchamiento de la pieza.
En caso contrario, deberá parar el batanador y comprobar el cosido de toda la pieza, cosiendo cualquier
rasgos descosidos.
Durante el procesamiento, varias comprobaciones de la sangría, tanto a lo largo como a lo ancho.
La pérdida de fibras que se depositan en el fondo de la máquina.
El aspecto y la mano del tejido, ligado al tiempo empleado, a la presión de los cilindros y la chapata,
el número de cabezas y los productos utilizados para obtener los rendimientos y emplumados deseados.

Defectos más recurrentes

Los defectos más comunes que se encuentran en las telas batas son las arrugas muertas causadas por:
puntos de saco demasiado largos o, a veces, descosidos, para que la pieza no se hinche;
inicio o final de la costura con los orillos no parejos, por lo que la pieza tiende a enrollarse sola;
orillos en tensión excesiva;
Humidificación inadecuada de la pieza.
También puede experimentar abrasiones o desgarros causados por:
presión excesiva de la zapatilla, en comparación con la presión del cilindro;
cuerpos extraños rígidos sobre el tejido pegados en los cilindros.

Gestión del trabajo

El batanero debe atender diligentemente al normal funcionamiento de la máquina y a su corrección.
realización de las fases de tratamiento de su competencia. En particular deberá:
controlar periódicamente y con regularidad el estado de desgaste de la caja de fresado y de los cilindros.
Solicitar la intervención del jefe de departamento, en caso de dificultades de carácter no identificable
para evitar daños mayores tanto a la máquina como al tejido trabajado.
Garantizar la correcta limpieza de la máquina, especialmente en cada cambio de tipo de tejido
bajo procesamiento.

Servicios

Tras la venta de la maquinaria, también le asistimos en la logística y, si el cliente lo desea, disponemos de técnicos capaces de volver a montar y poner en marcha la maquinaria.

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